En esta publicación vamos a hablar de otra curiosidad más sobre olivar, aceitunas y aceite. El bagazo, un residuo de la aceituna y de la extracción del aceite de oliva, contiene en su estructura unas sustancias llamadas taninos que se pueden emplear en el tratamiento de pieles animales de manera natural, con lo que se reduce el uso de productos químicos en la formulación.

Esta es la conclusión a la que ha llegado un grupo de investigación de la Universidad de Lleida (UdL) llamado “A3 Leather innovation centrer”, que está especializado en la cadena de producción de pieles. En sus investigaciones está el proyecto OLIPO que se centra en elaborar artículos de peletería con un cuero más sostenible y libre de contaminantes.

Anna Bacardit, directora del grupo de investigación, instalado en el campus de Igualada afirma que “Esta investigación no sólo hace más sostenible la industria de la piel sino que, además, contribuye a poner en valor un residuo de la industria de la extracción del aceite". Añade además, que el uso del bagazo da lugar a la obtención de una piel no solo más sostenible, sino de una gran calidad.

El sector del curtido de pieles desde hace años trabaja en ser más respetuoso con el medio ambiente, ahorro de agua y energía. Una tendencia creciente en todos los sectores económicos que en el siglo XXI quieren tener una responsabilidad social corporativa impecable. Además, la demanda valora estas cuestiones como no podría ser de otra manera. Por tanto, este grupo encamina sus estudios en estas vías, cruzándose en este caso con un producto de nuestro aceite de oliva…

¿Será casualidad? No lo creemos. De hecho, cada vez vemos más que todo lo que rodea al olivar y su aceite tiene un aprovechamiento integral obteniendo productos de mayor calidad, mas sostenibles y saludables para el medio ambiente. ¿Qué os parece?