Respecto a la densidad de árboles por Ha en olivares hay diferentes marcos de plantación que han ido a lo largo de los años cambiando desde 44 árboles a más de 2000 en algunas plantaciones a día de hoy. En el artículo de hoy hablaremos sobre la densidad de plantación, el volumen de masa foliar y la productividad relacionada con la demanda hídrica.

Rescatamos datos del gran José Humanes Guillén, tristemente fallecido recientemente, un investigador incansable en olivicultura moderna al que debemos mucho desde el sector. Usando su método de cálculo de cosecha potencial por hectárea publicado en los años 90 hoy trataremos el potencial productivo de una finca de olivar en función al volumen de copa y tamaño de los olivos, así como su marco de plantación.

Aunque al final, independientemente del marco de plantación, lo que marca la producción por hectárea es la cantidad de hojas expuestas al sol, puesto que hay más brotaciones y botones foliares, pero a mayor volumen de masa foliar más evapotranspiración y necesidad de agua por hectárea de la planta.

La medida se hace asemejando la copa de un olivo a un sector esférico esfera, habitualmente la relación anchura/altura en una poda normal es 4/3 así que 2 R/H = 4/3 por lo tanto H=3 R/2

La fórmula de volumen y superficie de un sector esférico son:

V = 2/3 π R²H

S = 2 π RH

Si sustituimos el valor de H

V = π R³

S = 3 π R²

Por lo tanto, midiendo el radio de varios olivos podemos deducir el volumen de copa por olivo media en la parcela, también la superficie ocupada por esa esfera y sabemos por experiencia que la superficie de proyección de la copa con ese dato y multiplicando los pies por hectárea obtendríamos los m3 de volumen foliar.

La superficie ocupada por el olivo puede extrapolarse a 3kg/m² en regadío y 2kg/m² en secano en cosechas de climatología favorable (no olvidemos que las matemáticas no son exactas en agricultura).

Un olivo plantado en marcos tradicionales de 10 x 10m (100 olivos por hectárea) con un radio de 3m tendría 84,78 m2 de superficie, pero tan solo 28,26 m2 de sombra de copa o lo que es lo mismo 84,78kg por olivo en regadío y 56,52kg por olivo en secano. O sea, un potencial productivo de 8478kg/ha en regadío y 5652kg/ha en secano en años de carga. Además, con un volumen de copa por olivo de 84,78m3 y 8478 m3/ha.

Por contra un olivo en superintensivo a marcos de 1,5 x 3m (2222 olivos) con 1m de radio tiene una sombra de copa de 3,14m2 y por tanto puede producir 9,42kg (aquí solo consideramos riego porque secano es inviable a este marco) extrapolando a parcela serían 20931 kg/ha... Con un volumen de copa de solamente 3,14m3 por olivo y 6977m3/ha.

En Oro del desierto nuestras plantaciones intensivas son de 7x7m y 7x5m principalmente lo que da entre 285 y 204 olivos por hectárea, si bien nuestros volúmenes de masa foliar son controlados para evitar una alta demanda hídrica, ya que el agua es al factor limitante en nuestra zona y disponemos de riego deficitario únicamente de apoyo. Por lo tanto nuestras plantaciones son mayoritariamente de radios de olivo entre 1,5 y 2m por olivo según variedad y parcela lo que da superficie de sombra de entre 7,06 y 12,56 m2 y producción de entre 21,18kg en plantaciones de 7x5m (285 olivos) y 37,68kg en las de 7x7m (204 olivos), o sea 6041kg/ha y 7687kg/ha potenciales por Ha, pero ojo 10,60m3 y 25,12m3 por olivo respectivamente o lo que es lo mismo 3018 m3 y 5124 m3 según las fórmulas calculadas, así que con un volumen de copa muy moderado nos permite estrategias de riego muy moderadas y producciones razonables y más sostenibles, puesto que la rentabilidad no subyace siempre en la máxima producción sino en la mayor diferencia entre costes e ingresos.

Por lo tanto no siempre los marcos más intensivos son menos eficientes o sostenibles incluso como se viene defendiendo desde parte del sector, porque es probable que con esta configuración aparte de producir mucho más por hectárea lo hace con menos evapotranspiración de masa foliar no productiva debido a la forma de la plantación.  Podemos ver cómo el coeficiente de kg/m3 mejora conforme más densa es la plantación, de manera inversa al radio de la planta. Es decir, que a más sectores siempre que se ejecuten las podas adecuadas al mismo puesto que el olivo en marcos estrechos, tienden a cargarse de madera y sombrearse con los años, por lo tanto el coste de poda es mayor, así como los costes de plantación, pero la precocidad, mecanización y la gran productividad justifican este tipo de plantación siempre que sea posible disponer de recursos hídricos y tierras llanas para poder instalarlo.

Esto es completamente discutible ya que son cálculos teóricos, pero es probable que el marco intensivo de 200-400 árboles/Ha en condiciones de algún factor limitante tenga menor coste de inversión y mejor retorno económico con menos m3 de masa foliar necesarios para producir por kg de aceituna. Para nuestra estrategia personal un marco más intenso sería inviable debido a la escasez de agua y un marco tradicional a día de hoy es inviable debido a la dificultad de mecanización y largo plazo de entrada en producción del mismo, además de que la teoría nos muestra la menor efectividad.

A toda esta discusión habría que introducirle muchas otras variables, pero nos ha parecido interesante ponerlo de manifiesto retomando una fórmula matemática de cálculo clásica de potencial productivo en función al tamaño y forma del olivo.