Andalucía vuelve a demostrar por qué es el origen del aceite de oliva. En el primer semestre de 2025, nuestra tierra ha exportado más de 536.000 toneladas de oro líquido por valor de 2.343 millones de euros, lo que representa más del 72% del total nacional. Un dato que habla por sí solo y que consolida a la región como el gran referente mundial del sector oleícola.
Italia, Estados Unidos, Portugal, Francia y Australia encabezan el listado de destinos donde el aceite andaluz se disfruta y se valora. Y no es casualidad. A pesar de los vaivenes del mercado, las guerras comerciales o la competencia internacional, el consumidor sigue eligiendo el aceite de oliva andaluz por su calidad, excelencia y autenticidad.
El consejero de Agricultura de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, lo resumía así: “Nuestro aceite no tiene competencia”. Y es cierto. Detrás de cada botella hay generaciones de agricultores, innovación, sostenibilidad y una cultura que forma parte del ADN andaluz. No en vano, más de 300 pueblos viven directamente del olivar, un sector que fija población, crea empleo y mantiene viva una forma de vida ligada a la tierra.

Campaña 2024-2025 con récord de existencias
La campaña 2024-2025 ha cerrado con el mayor nivel de existencias en tres años, alcanzando las 290.000 toneladas de aceite almacenadas. Son cifras que muestran una recuperación frente a las campañas anteriores, marcadas por la sequía, pero también plantean retos.
Aunque la producción ha sido buena (más de 1,4 millones de toneladas), los precios en origen siguen siendo un punto de preocupación. Según la organización agraria UPA, muchos productores han vendido por debajo de costes, lo que limita la rentabilidad, especialmente para el olivar tradicional, el más vulnerable.
En su análisis, un euro más por litro en origen habría supuesto hasta 4.000 euros adicionales por explotación, una diferencia enorme para miles de familias del campo.
El primer aceite del año ya está aquí
A pesar de los retos, el sector sigue demostrando su fuerza. Andalucía no solo produce más y mejor, sino que lo hace con una mirada puesta en la calidad, la sostenibilidad y la internacionalización. En Oro del Desierto seguimos trabajando y apostando por lo que creemos: un AOVE de la mejor calidad.
Hace unas semanas comenzamos la temporada con nuestro Oro del Desierto 1/10, un aceite de primera cosecha de edición limitada, que ya está casi agotado. Es el resultado de trabajo duro, el inicio de una nueva campaña que, un año más, pone a Andalucía en el mapa como la tierra donde nace el mejor aceite de oliva del mundo.





