Hablemos de nuestro territorio, de nuestras raíces, del Desierto, del clima y del suelo que lo hacen ser único en toda Europa y que sin duda nos diferencia de la mayoría de zona Olivareras de España. Hablaremos de eso que los franceses llaman “Terroir” en el vino, que traspasado a nuestro lenguaje sería el “terruño” aunque no sea exactamente sinónima a la francesa, el ambiente que nos rodea y que hace que nuestro aceite de oliva virgen extra sea especial.

Qué duda cabe que paseando por nuestra comarca entre la Sierra de los Filabres y la Sierra de Alhamilla en el campo de Tabernas, provincia de Almería, lo que vemos es una zona tremendamente árida y con un paisaje casi lunar, badlands, suelos desnudos con escasa vegetación. Para algunos un paisaje desolador, causado principalmente por unas precipitaciones medias anuales muy escasas que están en niveles de 200 l/m2; es por tanto la zona de menor lluvia del país y de prácticamente toda Europa, y se conoce como el “Desierto de Tabernas”. Además, debido a que casi nunca está nublado, somos la zona con más horas de sol al año de toda Europa, con más de 3000 horas al año, ¡¡no os lo podéis imaginar!!

Sin embargo si atendemos sólo a nivel de temperaturas medias y otros factores aparte de la precipitación, nuestra climatología es más bien mediterránea que semidesértica, de hecho, las temperaturas máximas y mínimas son menos extremas que en otras zonas más al interior de Andalucía.

Por tanto podemos afirmar que somos una zona semidesértica debido a esa falta de agua debida entre otras cosas a nuestra ubicación a 450-550m de altitud en un altiplano, rodeados de montañas y con el mayor macizo del país, Sierra Nevada, justo ubicada perpendicularmente a la llegada de frentes procedentes del océano Atlántico, los cuales suelen proveer de la mayor parte de precipitaciones que caen en la península ibérica. En nuestro caso no nos llegan al quedar en la parte occidental de Sierra Nevada la mayoría de ellas. Cuando llueve suele ser torrencialmente, tormentas procedentes del Mediterráneo o bien del sur.

El estrés causado por la ausencia de lluvias hace que sea muy complicado cultivar casi nada sin un aporte de riego, al menos de apoyo. El olivo es conocido por su gran adaptabilidad a climas extremos y a la falta de agua y existe en Tabernas desde hace miles de años, no siendo una comarca tradicional olivarera como otras en cantidad, sí que tuvo olivos desde tiempos de los fenicios, romanos y árabes, sobre todo ubicado en los lugares donde había una fuente o en cañadas donde de manera natural la precipitación escasa permitía que el riego mantuviese ese olivar. De hecho, otras zonas del norte de África u Oriente Medio tienen climas tan extremos como el nuestro, o más incluso y también cultivan olivar.

Si es cierto que esa falta de agua hace que los rendimientos agronómicos sean más bajos que en otras zonas, incluso aportando un riego de apoyo si es que la finca posee esos recursos.

Este estrés hídrico prolongado a lo largo de todo el año prácticamente, unido a un largo verano y a un corto pero frío invierno (suele bajar de 0ºC casi todas las noches en invierno) hacen que la cantidad de plagas, sobre todo hongos, sean muy escasas y por tanto, la sanidad del cultivo se de naturalmente sin apenas necesidad de tratamientos fitosanitarios. Lo cual nos permite llevar adelante una agricultura ecológica más fácilmente y obtener frutos sanos y sin incidencia de plagas de esta manera. ¿No todo iba a ser malo, no?

Todos estos factores hacen a nuestra zona tener unas condiciones fantásticas para producir aceite de oliva de mucha calidad, si bien ello requiere de un trabajo adecuado en campo y almazara también. De nada sirven buenas condiciones de una zona si no se trabaja con criterio y coordinación a la hora de elaborar ese virgen extra.

¿Porque son fantásticas esas condiciones?

Varias razones:

• Mas estrés hídrico supone mayor concentración de polifenoles y antioxidantes naturales en el AOVE. Como hemos comentado en otras publicaciones, nuestros aceites de oliva son realmente muy altos en estos contenidos con respecto a la media en el mercado.
• Muchas horas de sol y clima seco, nos permiten recoger temprano llegando el fruto al envero antes de que acontezcan episodios de mucho frío o que el fruto se estropee por otras inclemencias del tiempo.
• El fruto está sano debido a la escasa incidencia de plagas y enfermedades, lo cual está ligado a este clima extremo que no permite un desarrollo masivo de plagas por su crudeza.
• El contenido en aceite dentro del fruto es bastante alto comparado con otras zonas más productivas y compensa un poco la menor cantidad de kg de aceituna por hectárea que cosechamos.
• Con un correcto manejo del riego, si está disponible se puede conseguir una producción media razonable y pese a no ser alta, es estable.
• La floración del olivar acontece un poco antes que en otras zonas con lo cual esas flores que son muy sensibles a la temperatura suelen abrir y cuajar antes y por tanto con menos riesgo de abortos ováricos causados por la climatología.

Cuando comenzamos, en alguna ocasión nos dijeron que no era posible producir AOVE en el desierto y que fuese de calidad aún menos, que era muy extremo… ¿ecológico? ¡¡Aún menos factible!!... ¿Y sabéis qué? Nosotros pensamos que igual podría ser verdad, pero que no por ello íbamos a dejar de intentar producir aquí un aceite de oliva virgen extra ecológico y que además debería de ser obteniendo la máxima calidad posible, puesto que teníamos claro que no estamos en una zona de grandes rendimientos agronómicos. Y el resultado es que 20 años después de comenzar no solo producimos un AOVE bueno, sino excelente y premiado en mas de 250 ocasiones y estar en los rankings de los. Por lo tanto lo tenemos claro, nunca se puede dejar de intentar algo porque te digan que no es posible, sino todo lo contrario.

El Desierto sí que es una zona para cultivar el olivar, y además, si se sabe sacar partido de las ventajas que tiene e intentar limar o lidiar con los inconvenientes existentes se puede obtener un producto de máxima calidad.

¿Aceite de Oliva en el Desierto? ¡Sí, en el Desierto!