En esta publicación nos hacemos eco de una investigación interesante y relevante para nuestro sector, el estudio de la Universidad de Córdoba junto al CICGE (Centro de Investigação em Ciências Geo-Espaciais, Faculdade de Ciências, Universidade do Porto) analiza la influencia del cambio climático para el cultivo del olivar. Rafael Villar y Salvador Arenas Castro, han sido los principales investigadores del estudio.
Aplicando una herramienta de modelo de distribución de especies, el cual predice las zonas plausibles de cultivo para una especie según las características del territorio y el clima, las ambientales.
El estudio revela una reducción del área disponible para el cultivo en la mayoría de las variedades, debido principalmente al descenso de las precipitaciones y la pérdida de humedad en el suelo, asociada directamente al estrés hídrico para el cultivo. Según afirma Salvador Arenas, uno de los investigadores del CIGCE principal autor del estudio.
En el caso de algunas variedades concretas como Nevadillo del norte de Córdoba y Sierra Morena, se estima que en 2100 ya no existirá área para su cultivo.
También el cambio climático afectará mucho a las variedades Manzanilla, Lechín de Sevilla (no confundir con Lechín de Granada, el nuestro…) y Picudo. Si el estudio ya augura un descenso de superficie de las variedades más cultivadas, las minoritarias como estas tres tendrán un gran riesgo de desaparecer ya que son producidas en áreas muy pequeñas territorialmente hablando, con condiciones micro climáticas que pueden desaparecer al ser aun más sensibles al cambio.
El área para el cultivo potencial de la variedad Picual, la más extendida en Andalucía, los investigadores prevén que aumentará potencialmente un 25%. Esto se debe a que zonas actualmente más frescas de Almería y Granada no cultivadas y ubicadas en zonas altas de la Alpujarra podrían ser susceptibles de mejorar de cara a la ubicación del cultivo en el futuro al aumentar la temperatura.
Por provincias la evolución estimada es la siguiente:
Según el equipo el cambio climático es un factor que va a ser muy importante en la desaparición de espacies vegetales y animales. El problema que prevén es que la subida hacia el norte del cultivo choque con otros cultivos o áreas protegidas que no se permitan cultivar.
Por su parte Rafael Villar, de la UCO destaca la necesidad de que la administración pública tenga en cuenta esta predicción y vaya tomando ya medidas y planifique este cambio y su incidencia en la economía. También destaca que es importante transmitir a la población que el cambio climático no es un mito y que va a repercutir en nuestra calidad de vida y economía local y debemos hacer todo lo posible para impedirlo.
Nos parece muy interesante este estudio y estamos intentando conocer más detalles. Como pequeña aportación, nuestra parte como opinión, es curioso como al parecer zonas menos propensas para el cultivo puedan serlo en el futuro y que precisamente Almería sea una de ellas, echamos en falta mención a mas variedades y nos choca que sea Picual precisamente la menos damnificada por el cambio climático, ya que según nuestra experiencia (ya que la cultivamos) sufre más ante el estrés hídrico que arbequina, hojiblanca y por supuesto que el lechín de granada, que es una de las variedades más rústicas existentes, no en vano por eso es una de las variedades autóctonas aquí. Pero carecemos de los medios para demostrarlo más allá de nuestra experiencia en un lugar donde tenemos un clima subdesértico y conocemos de primera mano lo duro que es trabajar un olivar en condiciones de falta de agua (imposible no es como veis…)